El ciclo de vida de un producto.

El ciclo de vida de un producto es la evolución de las ventas de un producto o servicio en el mercado, desde su lanzamiento hasta su desaparición del mercado. Es caracterizado por 4 fases: la introducción, el crecimiento, la madurez y el declive. Voy a presentar 3 productos que corresponden, en mi opinión, cada uno, a una de las tres primeras fases del ciclo de vida.

La fase de introducción.

Pienso que el coche eléctrico es un producto en fase de introducción. En efecto, es un producto muy nuevo en el mercado, lanzado hace pocos meses.

En España, según el periódico El País, las ventas empiezan a crecer, aunque 300 coches vendados en 10 meses no es un resultado muy impresionant

Además, en los medios de comunicación, podemos observar los esfuerzos de marketing hechos para las empresas que comercializan los coches eléctricos para que una más grande parte de los consumidores conozcan a esta innovación.

La fase de crecimiento.

A mi me parece que los Smartphones son un producto en fase de crecimiento.

En efecto, lanzados algunos años, los smartphones son muy presentes en el mercado de la telefonía móvil. Según el 20 minutos, las ventas de teléfono “inteligente” representan 26% de las ventas de teléfonos móviles. Hoy en día, los smartphones son muy extendidos, especialmente en los países desarrollados donde es casi la fase de madurez, pero es realmente en su fase de crecimiento en países como Rusia o China.

El número muy importante de publicidades, promociones y otros medios de marketing sobre los smartphones son también característicos de un crecimiento de las ventas.

La fase de madurez.

La pasta. La pasta es un producto de consumo muy usual, que, como la mayoría de los productos usuales de consumación, es en fase de madurez. Por ejemplo, la marca de pasta Barilla es muy implantado en el mercado, aunque tiene numerosos competidores (Da Roca, el Pavo, Gallina Blanca…). Pero las ventas de la marca no van a crecer en un futuro próximo, a menos que la empresa encuentre un medio de prolongar su ciclo de vida, ya que no hay posibilidad de conquistar nuevos clientes. Por eso, no hay mucha comunicación porque la marca es ya conocida por el público.